Patricia ya funciona como jefa de gabinete blue pero teme que Milei le entregue Seguridad a Ritondo
Patricia Bullrich aprovechó la internación de Guillermo Francos por un cuadro de gastroenteritis para convertirse en la jefa de gabinete blue.
Como anticipó LPO, la ministra de Seguridad avisó que no quiere ir a la jefatura de gabinete. No es que no le interese acumular poder: su temor es que Cristian Ritondo quede de ministro de seguridad.
Por eso Patricia pide que, si pega el salto a la jefatura, su ministerio quede para alguien de su equipo. Con Ritondo eran aliados hasta que el diputado la corrió del PRO bonaerense y recibió una respuesta feroz: echó al secretario de Seguridad, Vicente Ventura Barreiro, que responde a Ritondo, mediante denuncias ante la Oficina Anticorrupción.
Ritondo recibió este miércoles un llamado de Milei, que lo felicitó por haber garantizado el veto en Diputados. El ex ministro de Seguridad de María Eugenia Vidal no se desvive por volver al cargo y prefiere ayudar al presidente desde donde está. Antes que nada, pide que haya un acuerdo de cúpula con Macri.
Sin preguntarle a nadie y con su habitual voracidad, Bullrich comenzó a formar parte de las decisiones políticas del gobierno y le otorgó un triunfo importante esta semana a Milei. Le acercó los 5 diputados radicales que fueron claves para mantener el veto a las jubilaciones en la Cámara baja, una jugada política que fue visible para todo el mundo.
En el Gobierno tomaron nota de que Bullrich comenzó a moverse en los medios para instalar que el triunfo del oficialismo en el Congreso fue por obra de ella y no de otros actores como el propio Francos o Karina Milei, que estuvo en la reunión con los radicales amigables.
El propio Milei elogió a Patricia en la reunión que tuvieron este miércoles con senadores y destacó su trayectoria política. Al lado estaba Francos, que un día antes recibió quedó con las orejas coloradas por los comentarios de los gobernadores en el CFI. Un par de ellos compararon capturas de Whatsapp y se dieron cuenta de que el jefe de gabinete les había ofrecido el mismo cargo a ambos.
Los cortocircuitos con Santiago Caputo se dan porque en la banda de los Peaky Blinders dicen que Francos se olvida de lo que acuerdan antes de iniciar una negociación con los gobernadores o el Congreso. Pasó con el decreto de acceso a la información pública, que Francos prometió revisar ante los diputados, pese a que la banda de Caputo dio la orden de no ceder.
Fuente: La Politica On Line