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Las investigaciones científicas que revelaron qué tienen en común las personas y los animales cuando envejecen

Las investigaciones científicas han revelado interesantes similitudes entre las personas y los animales en el proceso de envejecimiento. 

Los estudios recientes demuestran que tanto en humanos como en diversas especies animales, los patrones de comportamiento social y salud cambian significativamente con la edad. 

Desde los ciervos en la isla de Rùm hasta los macacos rhesus en Cayo Santiago, estos patrones ofrecen una nueva perspectiva sobre cómo el envejecimiento afecta a diferentes seres vivos. 

Las investigaciones científicas que determinaron las similitudes entre las personas y los animales cuando envejecen

Gracias a recientes investigaciones científicas se pudieron obtener detalles sobre los patrones comunes en el envejecimiento tanto de humanos como de animales. 

En este complejo análisis se destacaron sorprendentes similitudes en su comportamiento social y su salud. 

Ciervos

Según el ecólogo Gregory Albery de la Universidad de Georgetown, las hembras de ciervo envejecidas tienden a reducir sus conexiones sociales y permanecer en compañía de menos individuos. 

Los especialistas creen que este fenómeno podría estar relacionado con el riesgo aumentado de enfermedades. 

Las hembras de ciervo disminuyen sus interacciones sociales al envejecer, posiblemente para evitar el riesgo de enfermedades (Fuente: Pixabay)

El estudio de Albery en Nature Ecology & Evolution explica que los ciervos mayores reducen su contacto con otros, posiblemente para evitar el riesgo de ingestión de parásitos presentes en los excrementos de sus congéneres.

“Hay indicios de que el sistema inmunitario de los ciervos que envejecen es menos eficaz para suprimir las infecciones por gusanos, por lo que podrían tener más probabilidades de morir a causa de ellas”, detalló Daniel Nussey y coautor del estudio.

Ovejas

Por otro lado, un estudio científico en el que también participó el ecólogo Daniel Nussey en la isla Hirta revela que las ovejas de Soay también muestran una disminución en sus interacciones sociales a medida que envejecen. 

Nussey identificó que los niveles de anticuerpos en la sangre, que ayudan a combatir parásitos gastrointestinales, disminuyen con la edad, incrementando el riesgo de mortalidad durante el invierno. 

Algunos de los principales hallazgos del estudio incluyen:

  • Las ovejas de mayor edad tienden a moverse menos, lo que limita su contacto con otros animales.
  • Las ovejas viejas prefieren quedarse en zonas con vegetación de mejor calidad, aunque esto cambia en el último año de su vida.
  • Los niveles de anticuerpos en sangre disminuyen con la edad, lo que afecta su capacidad de supervivencia durante el invierno.

Aunque la evidencia sugiere que las ovejas y los ciervos envejecidos tienden a reducir su área de distribución y sus contactos sociales, esto puede ser una respuesta a una menor capacidad para manejar infecciones y una mayor vulnerabilidad general.

A medida que envejecen, los animales como ovejas muestran una mayor susceptibilidad a infecciones, reflejada en su comportamiento de aislamiento (Fuente: Jamain / Wikimedia Commons)

Macacos

Una investigación científica sobre los macacos rhesus en Cayo Santiago, una isla en Puerto Rico, proporciona más información sobre cómo las redes sociales cambian con la edad en diferentes especies. 

En 1938, científicos liberaron 409 macacos rhesus en esta isla deshabitada para estudiarlos. Actualmente, hay unos 1.800 macacos descendientes de esa población original.

Los macacos dedican más del 20% de su tiempo a comportamientos cooperativos como el acicalamiento. Sin embargo, a medida que envejecen, las hembras reducen el tamaño de sus redes sociales, centrándose en parientes y compañeros de largo plazo.

Por alguna razón, los macacos con menos conexiones sociales tienen más probabilidades de morir.

Se comprobó que después del huracán María en 2017, los macacos socialmente conectados tuvieron más chances de sobrevivir. Además, los macacos dominantes mantienen sus posiciones y viven más tiempo.

Esto traza un paralelismo que, al envejecer, tanto animales como humanos pueden volverse más selectivos con sus relaciones sociales, priorizando amigos cercanos y familia.

Fuente: El Cronista

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