Polémica boda real en Noruega: la princesa Märtha Louise se casa con el chamán estadounidense Durek Verret
El próximo sábado, en un rincón pintoresco del sur de Noruega, la princesa Märtha Louise y el chamán estadounidense Durek Verret contraerán matrimonio. Este evento ha estado rodeado de numerosas críticas y ha debilitado el apoyo a la familia real escandinava, que también enfrenta informes negativos sobre un miembro problemático acusado preliminarmente de violencia doméstica.
Según información de Associated Press, la princesa limitó su participación oficial en la casa real noruega en 2022 para enfocarse en su relación con Verret. Aunque mantiene su título, Verret no tendrá ningún título ni deber oficial tras la boda.
Märtha Louise afirmó que puede comunicarse con ángeles, mientras que su futuro marido, quien se proclama chamán de sexta generación de California, alega que puede hablar con una amplia gama de espíritus y posee un medallón que lo protege contra maleficios y cura enfermedades.
En 2019, la pareja llegó a un acuerdo de no usar la conexión de Märtha Louise con la casa real ni su título para fines comerciales. Sin embargo, Associated Press señala que este año ella etiquetó botellas de ginebra con su título y lanzó la marca justo antes de la boda, desobedeciendo la directiva del rey Harald V de no lucrar con su estatus real. La etiqueta fue finalmente modificada.
La pareja también vendió sus derechos de foto de boda a una revista de celebridades británica y los derechos cinematográficos a Netflix. Estas decisiones han sido criticadas por los medios noruegos, que afirman que van en contra de las prácticas locales. La pareja ha respondido a menudo de manera agresiva contra la prensa mientras se promocionan en redes sociales.
No es la única polémica en la realeza escandinava
Mientras tanto, otro escándalo sacudió a la monarquía noruega: el hijo mayor de la princesa heredera Mette-Marit, Marius Borg Høiby, es sospechoso de causar daños corporales y materiales. Según Associated Press, Borg Høiby confesó que estaba intoxicado y consumía cocaína cuando fue arrestado brevemente el 6 de agosto en Oslo. Este incidente ha sido catalogado como “un asunto serio” por el príncipe heredero Haakon.
Estos escándalos han erosionado profundamente el apoyo a la monarquía noruega. El rey Harald V ha permanecido en silencio ante estas situaciones. Un partido político noruego conocido por su postura antimonárquica está aprovechando los recientes escándalos para proponer un cambio en la Constitución que aboliría la monarquía.
Esta propuesta, impulsada por Andreas Sjalg Unneland del Partido Socialista de Izquierda, sugiere un referéndum sobre la cuestión. “Estos casos muestran algunos de los desafíos fundamentales con la monarquía”, dijo Sjalg Unneland a Associated Press. La propuesta se espera que sea presentada el próximo mes, aunque es poco probable que reciba apoyo de otros legisladores.
Cómo será la boda
La boda, que seguirá la liturgia de bodas de la Iglesia Noruega, se ha etiquetado como un evento privado sin lista pública de invitados. No obstante, el hogar real en Oslo ha confirmado la asistencia de Harald, la reina Sonja, el heredero al trono Haakon y la princesa heredera Mette-Marit junto con sus hijos. Marius Borg Høiby no estará presente.
Según Associated Press, la princesa heredera Victoria de Suecia y su esposo, el príncipe Daniel, también asistirán a la ceremonia en Geiranger, que se encuentra a 265 kilómetros al norte de Bergen, la segunda ciudad más grande de Noruega. Sin embargo, el rey Frederik de Dinamarca y su esposa, la reina Mary, no asistirán.
Estrellas de la realidad, influencers y personalidades de televisión completarán la lista de invitados en el escénico pueblo de Geiranger, ubicado en las orillas del fiordo homónimo designado como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. El yate real noruego, Norge, ha anclado allí, rodeado de montañas y ríos, y servirá como residencia del rey y la reina durante el evento.
Märtha Louise tiene tres hijos de su anterior matrimonio con Ari Behn, de quien se divorció en 2017 tras 14 años de matrimonio. Aunque es la primera hija del rey de 87 años, su hermano, dos años más joven, sucederá a su padre como rey. La Constitución noruega fue modificada en 1990 para permitir que el primogénito, independientemente del género, tenga prioridad en la línea de sucesión. El cambio no se aplica retroactivamente, por lo que Haakon sigue siendo el primero en la línea al trono y su hija mayor, la princesa Ingrid Alexandra, ascenderá algún día al trono noruego.
Fuente: InfoBae