Industria 4.0: el desafío de la maquinaria agrícola de potenciar el camino para ser “inteligente”
Grandes empresas en todo el mundo ya están implementando tecnologías revolucionarias como robots colaborativos en plantas de ensamblaje, capaces de detectar la proximidad de los trabajadores para evitar daños o fábricas completamente automatizadas que informan en tiempo real sobre cada actividad en su línea de producción.
Estas compañías utilizan a la digitalización, como una herramienta que le permite ser eficiente y competitivo, en un mundo cada día más artificial.
En ese marco, el ingeniero Néstor Gazquez, docente de la UTN Rosario, habló sobre el potencial de la implementación de tecnologías digitales en empresas.
Lo hizo destacando la necesidad de adaptarse a este nuevo paradigma, para mejorar la productividad y competitividad en un mundo globalizado.
“Hay necesidad en las empresas de maquinaria agrícola de actualizarse e integrarse a la Industria 4.0, con la finalidad de mejorar su productividad y poder ser competitivas en este mundo globalizado, donde las tecnologías ya nos sobrepasaron”, aclaró el docente.
En diálogo con Infocampo, el ingeniero Gazquez sostuvo que todos estamos continuamente interconectados a los teléfonos.
“Estamos interconectados con el mundo, y es necesario que las empresas también lo hagan para poder vender, comprar, competir y diseñar”, destacó el profesor, manifestando que la Industria 4.0 son tecnologías que permiten hacer eso: “integrarse”.
MAQUINARIA AGRÍCOLA: TECNOLOGÍAS HABILITADORAS
Las tecnologías habilitadoras son las herramientas que permiten a las empresas desarrollar el proceso de transformación digital, adaptarse a la Industria 4.0 y al modelo de la fábrica inteligente que tantos empresarios van a abrazar en los próximos años.
El Cloud computing (la nube), la impresión 3D, el internet de las cosas, la inteligencia artificial, la robótica, la realidad aumentada, la ciberseguridad, entre otras tecnologías, son las que posibilitan que la digitalización se adueñen de los procesos.
“En nuestro país hay empresas de maquinarias agrícolas que ya están trabajando con algunos aspectos de la digitalización que estamos planteando. Esto es fundamental para que puedan unirse al mundo de forma más rápida y eficiente”, contó el entrevistado.
En ese sentido, Gazquez indicó que “es un camino que hay que recorrer”, como todas las tecnologías que se deben implementar para mejorar los procesos de producción. “No es algo que se implementa comprando un software. Por el contrario, hay que adecuar todo el sistema productivo a esa forma de pensar. Y por eso el componente humano es muy importante”, indicó con convencimiento.
CAMBIAR LA MENTE DEL EMPLEADO
El componente humano es un aspecto que dentro de la Industria 4.0 está muy arraigado.
“El trabajador necesita cambiar su forma de ver el mundo, y comenzar a palparlo desde otra perspectiva. Ese cambio de paradigma que tiene que hacer el ser humano es importantísimo”, reflexionó el Profesor, quien en Agroactiva 2024, brindó una charla sobre los pormenores de la digitalización en la industria.
Cuando hablamos de Industria 4.0, no solamente nos referimos a las máquinas, sino que incorpora a la persona como parte activa y esencial ya que su forma de pensar, aprender, interactuar, consumir, trabajar, etc., es clave dentro de éstas tecnologías digitales.
“Estamos trabajando con generaciones en las que los Nativos Digitales son, prácticamente, el 75% de la masa activa. Éstos nacieron con esta explosión tecnológica y están muy habituados a trabajar con estos desarrollos”, ejemplificó.
Por otra parte, desafió el rol de la educación en estos procesos. “Hay que capacitarse más: son tecnologías que en el mundo ya están desarrolladas. En cambio, en Argentina, queda mucho camino por recorrer y la educación tendrá un rol fundamental”, manifestó.
Por último destacó que es relevante poner en agenda estos temas, debido a que el futuro del trabajo dependerá de la Industria 4.0.
“Debemos promocionarlo, para que más jóvenes se preparen. Los nuevos trabajadores deben observar el potencial que tiene estas tecnologías y las posibilidades de cambio que traen”, vaticinó.
ES MÁS QUE UN TÉRMINO
El término “Industria 4.0” vio la luz por primera vez en 2011 durante la Feria de Hannover , Alemania, acuñado por el gobierno de ese país europeo. Esta nueva revolución industrial se distingue por la integración de tecnologías digitales avanzadas en los procesos de fabricación.
Sin embargo, aún queda una gran brecha tecnológica entre grandes y pequeñas empresas, incluso en el mismo segmento productivo.
Para cerrar esta brecha tecnológica entre grandes empresas y PYMES, se necesita una colaboración activa. Acciones coordinadas con universidades y proyectos empresariales que son esenciales para desarrollar capacidades en innovación productiva, permitiendo la implementación de soluciones tecnológicas necesarias.
El inmenso potencial de adquisición y transmisión de datos permite manejar eficientemente la fabricación en un contexto general. Esto incluye aspectos propios a la fabricación, avance y gestión de proyectos, análisis de mercado, determinar puntos críticos, control de almacenes, flujo de materia prima, entre otros.
“El propósito principal es difundir el concepto de Industria 4.0, con el fin que usuarios reconozcan las herramientas tecnológicas disponibles para mejorar la productividad y la relación con los demás aspectos que constituyen la actividad”, destacó Gazquez.
Por otra parte, sumó que es fundamental que el sector agropecuario, junto con todo lo que abarca su industria, “adopte este enfoque de trabajo para mantenerse competitivo” en un mundo globalizado.